El origen de todo sindicato se fundamenta en la defensa de los derechos laborales y salariales y mantiene una lucha constante contra la discriminación, además de que fomenta el respeto y la dignidad de cada trabajador.
En síntesis, un sindicato debe ser todo, menos entreguista al gobierno en turno y, digan lo que digan, el de salud que ha comandado por varios años la hoy diputada local Blanca Águila Lima jamás se ha entregado al poder, ha aprovechado su cercanía con gobernadores emanados de su partido, para lograr conquistas y derechos para toda la base.
Sin embargo, esta vez existe un riesgo de que todo lo que han logrado y alcanzado en muchos años de lucha, se vaya al caño, y no es exageración.
Entre las planillas para dirigir la sección 27 de Tlaxcala existe la de color vino, la cual busca confundir a los agremiados haciéndose como la elegida por la gobernadora.
Si esto fuera así, es doblemente preocupante, pues Lorena Cuéllar Cisneros estaría faltando a su palabra de no inmiscuirse en la elección del sindicato de salud.
En su registro, Guillermo Hernández, quien encabeza la fórmula, declaró a los cuatro vientos que su propuesta más importante de campaña es: “hacer un sindicalismo de la nueva historia”, es decir ocupó, quién sabe si con permiso, el slogan del gobierno del estado para mostrar que su dirigencia estará entregada al poder en turno.
Por ello el llamado de reflexión de la candidata de la planilla azul, Águila Lima, quien pide a la base que piensen al momento de votar entre una candidata con años de experiencia en la defensa de la base trabajadora y de sus familias, o entre un candidato a modo que lo único que quiere es entregar todo lo que han alcanzado en muchos años de lucha.
Ayer, desde Palacio de Gobierno salió la orden de decir que la mandataria no se entromete en esta elección, lo cual se espera sea cierto.
####