Por Israel Lara García
Es inevitable en política electoral hacer futurismo, apenas se sienta la persona gobernante recientemente electa, cuando ya se están perfilando sucesores, no importa si la contienda por la renovación será en un año, tres, cuatro o seis, incluso. Esta condición rebasa los límites de los cargos públicos de elección popular.
Por ejemplo, si hablamos de un año y tomamos como referencia al congreso local de Tlaxcala, el presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política, órgano de gobierno de nuestro congreso, una vez que se conoce la totalidad de la legislatura electa, se especula y futurea quien presidirá, de acuerdo al partido; que, en base a la ley orgánica del poder legislativo del estado de Tlaxcala, corresponde al partido con mayor número de curules y se alternan si es que ningún partido tiene la mayoría absoluta, al menos así era cuando se respetaba la ley orgánica que en espíritu lo que busca es la pluralidad en el la titularidad de este órgano de gobierno.
Hoy, sin embargo los contrapesos no existen y el equilibrio ha sucumbido a los intereses del partido mayoritario, logrando con acuerdos de pleno, lo que no les corresponde por ley. Esto en razón, que el año pasado, que correspondió al segundo año legislativo, no se le entregó la presidencia al PT, partido que en números de diputados sigue al movimiento de regeneración nacional, dejando ese espacio para morena quien presidio desde el primer año; y finalmente hace unos días, ratificaron a la diputada Marcela González, para presidir el último año de esta legislatura. Impidiendo así, que dicha presidencia, se rotara entre las fuerzas políticas representadas al interior del congreso. Pero más allá de esta situación atípica, al interior del congreso, siempre se especula quien seguirá en presidir la Junta.
Por su lado los gobiernos municipales, también son un ejemplo donde el futurismo se echa andar una vez toman protesta los integrantes de ayuntamiento, y se empieza a decir: que si el regidor será el próximo; o que si el cuñado de la gobernadora, (Raymundo V.); o que si la esposa (Miriam M) o si el hijo del edil (Cachorro); o bien hoy con la reelección, que si el mismo alcalde (Pablo B), o el candidato que perdió por poco (Jorge R); o la diputada del distrito local, (Diana T.) etc., etc., etcétera.
En los periodos de cuatro años como los municipios de Hidalgo, el futurismo también está a la orden del día y los aspirantes surgen de todas partes siempre tratando de abanderar al partido dominante, en el caso del estado vecino, en el partido morena se cuentan por decenas, los aspiracionistas por municipio; así como en su momento, aquí en Tlaxcala, en 2007, la pléyade de aspirantes a ediles vía el Partido Acción Nacional, fue bastante considerable.
Estados Unidos de Norteamérica, elige presidente cada cuatro años con derecho a reelección, y también allí futureamos, supongo que usted amable lectora, lector. Recuerda que una vez que el presidente Biden ocupó la casa blanca, las plumas mexicanas ocupadas del análisis internacional, escribían sobre el 2024 y Kamala Harris encabezando a los demócratas, hoy esa especulación esta casi diluida, por el enorme peso electoral del ex presidente Trump.
Y ni como evitar hablar de los encargos de 6 años, ya sea una curul senatorial, gobierno estatal o presidencia de la república; a los mexicanos nos da por futuruearle. Mas allá de nuestro oficio u ocupación, nos encanta proyectarnos en cuanto a quien puede ser la siguiente o el siguiente, por ejemplo, en el senado, desde que Lorena Cuellar es gobernadora, varios de sus integrantes de gobierno se barajan como posibles senadores, Alejandro Aguilar, Alfonso Sánchez, Sergio González, Dulce Silva, Irma Garay, Mariana Espinoza de los Monteros, entre otros varios, mientras que por el lado de la oposición el perfil más pronosticado es el de la presidenta estatal del PRI, Anabel Avalos.
Por su parte en la lista para suceder a la actual gobernante, hay un nombre que se maneja desde inicios de sexenio, Alfonso Sánchez García, hijo del ex gobernador Sánchez Anaya; el cual más allá de la frontera electoral del 2024, es decir, sea senador, diputado federal o local, o se mantenga como secretario de estado, en infraestructura o cualquier otro lugar, quizá incluso desde la presidencia estatal de su partido; tal como lo hizo en su momento el neo morenista Marco Mena quien, desde la dirigencia estatal de su partido, brincó a la candidatura al gobierno estatal; cualquier lugar que tenga el heredero de Sánchez Piedras, será gobernable.
Todo lo hasta aquí especulado, es debido a lo acontecido el día de hoy miércoles 6 de septiembre de 2023, fecha marcada en el calendario para la designación de la persona que será candidata a presidencia de la república en 2024 por el partido en el poder. Claudia Sheinbaum hizo validos los pronósticos y ganó cómodamente, el derecho a representar a morena en la elección presidencial del próximo año. Esto que desde hace unos meses era previsto por opinadores profesionales y amateurs, dio pie a algo inesperado, o, mejor dicho, poco esperado, puesto que si estaba en el espectro de posibilidades; Marcelo Ebrard quien, a principios de sexenio, era el sucesor natural del actual mandatario, fue desplazado y derrotado, e incluso fue maltratado, de acuerdo con la narrativa, que él mismo construyo desde que se inició este proceso interno de morena. Hoy antes de que se diera a conocer el resultado oficial, Ebrard Casaubon se bajó de la contienda, y ha dejado ver con sus declaraciones, que quizá no apoye a Claudia en su aspiración presidencial.
Tal situación da pie, para que podamos futurear, a quien tenemos gusto por ello, más allá de que la especulación es un deporte nacional. el futurismo tiene un atractivo inevitable, dicho todo lo anterior, me permitiré evocando a Marty McFly, hacer unos futuristas apuntes, que más pronto que tarde podrán ser rechazados por la realidad o en una de esas, con la ayuda del DeLorean, acierto en mis apuntes del mañana. Los cuales a continuación comparto con ustedes:
Marcelo se queda en morena y a cambio de su propia senaduría y algunas posiciones en candidaturas al interior de la república, Tlaxcala entre ellas, se enfila a construir lo que será su ultimo boleto a la presidencia en el muy, muy, muy lejano 2030.
Ebrard rompe con morena y espera la convocatoria de MC para inscribirse como precandidato de este partido a la presidencia de la República, en el camino atrae a varios ex priistas, alguno que otro panista y mucha pléyade de morena que lo seguirá sin duda alguna, entre ellos Ricardo Monreal, desde allí invitan al Frente Amplio por México y a Xóchitl Gálvez a medirse para lograr un solo candidato de aspiración a través de una declinación, tal y como lo sugirió públicamente Agustín Basave Alanís, secretario de ayuntamiento, de Monterrey y mano derecha de Luis Donaldo Colosio Jr.:
“…Que en el momento adecuado se construya un acuerdo entre el Frente Amplio por México y MC para que se realicen encuestas antes de la fecha de la elección, y que el candidato o la candidata de oposición que esté abajo en la intención del voto se comprometa a declinar a favor de quien lleve la delantera. Es decir, si para entonces el candidato de MC, que espero salga de nuestras filas, no obtuvo el apoyo de la mayoría del electorado opositor, deberá retirarse de la contienda y sumarse a Xóchitl, y viceversa”
Poniendo todas sus fichas en un posible acuerdo con Xóchitl Gálvez, más allá de la opinión de los lideres partidistas de PAN, PRI y PRD que para esas alturas estarán ya rebasados por la inercia de la campaña presidencial.
- Mi especulación favorita, el ex priista, ex democracentrista, ex perredista, ex convergencista y para ese entonces ex morenista, Marcelo Luis Ebrard Casaubón, al abandonar morena, no se inscribe en MC, sino que, en un acuerdo con el frente amplio, se convierte en candidato al senado por el frente amplio en la ciudad de México junto con Ricardo Monreal quien viene en su mochila, como candidato a jefe de gobierno de la ciudad. Y desde allí, más allá del resultado presidencial y ante la falta de figuras en la oposición, podrán construir con mucha más certeza un camino al 2030. El cual si se queda donde esta, pinta que es una harta empinada cuesta.
Empero la única realidad, es que hay dos mujeres que representarán cada una a su respectiva fuerza política, y lo que haga o deje de hacer Marcelo Ebrard sin duda tendrán consecuencias a favor de una y en detrimento de otra. ¡En una nuez! Así es como están las cosas a partir de hoy. Parafraseando al queridísimo Dr. Emmett Brown de la icónica Saga de Volver al Futuro, Solo me queda decirle desde aquí al ex carnal Marcelo Ebrard:
«¡NO HAY TIEMPO QUE PERDER, MARCY! ¡EL FUTURO ESTÁ EN TUS MANOS!»