
En Tlaxcala se prevé en 2021 una elección a tercios, con un Partido del Movimiento de Regeneración Nacional y sus posibles aliados del PT, PES y Nueva Alianza, con una diputada federal con licencia Lorena Cuellar Cisneros, con altas posibilidades de ser su candidata.
Por el otro lado, la mega alianza «Juntos por Tlaxcala» con el PRI-PAN-PRD-PAC- y PS le apuestan a juntarse para con sus estructuras mantener la gubernatura, y ahí la alcaldesa Anabell Ávalos se perfila para ser la abanderada.
La otra carta será el «marianismo» con el ex titular de la Secretaría de Fomento Agropecuario, Jonatan Bretón Galeazzi por parte del partido Movimiento Ciudadano.
Inició su carrera política en el PRI, donde fue síndico y alcaldesa de la capital y diputada local, y posteriormente fue senadora por el entonces Movimiento Progresista del PRD-PT y MC.
Intentó ser gobernadora por el PRD y PT, pero fracasó en las urnas, y luego siguió a AMLO en su salida del sol azteca, quien fundó Morena y con ese partido y su aliados se convirtió en diputada federal, cargo que dejó para ser coordinadora de la delegación del Bienestar, desde donde promovió sus aspiraciones a la gubernatura.
¿Pero que comunica y cómo comunica Lorena Cuellar?
La comunicación ha sido complicada para la política, pues no hay un orden en los mensaje que lanza en sus redes sociales, la cual es básica para que los ciudadanos no tengan la sensación de que sólo son utilizados en campañas, con un fin más propagandístico que informativo.
Los votantes, y el estado no es la excepción, exigen una comunicación más humana y continuada a la que los partidos han intentado acercarse a través de nuevas vías como las redes sociales, donde el elector participa y deja de ser una audiencia pasiva para tener voz, sobre todo en tiempos de pandemia del Covid-19, que han revolucionado la forma de hacer campañas, y temen ser contagiados del mortal coronavirus.
La prueba más reciente fue el registro el pasado sábado en la sede de MORENA, donde se registraron como aspirantes a la candidatura al poder ejecutivo local, y no hubo colocación de un mensaje contundente, solo llamar a la unidad, pero sin decir el cómo.
Llamó más la atención que en plena pandemia y que en la Ciudad de México, donde se reportan los mayores casos de Covid-19 pusieran en riesgo a sus simpatizantes en su salud, quienes al viejo estilo priísta fueron decenas de seguidores al acto para cobijarla y tratar de mostrar su músculo político.
Sus mensajes periféricos de Lorena Cuellar en sus redes sociales en los últimos días han sido, ¡Vamos juntos por el cambio en nuestro estado!, ¡Vamos por la transformación del estado!, Vamos juntos a transformar Tlaxcala!, pero no se aprecia una estrategia comunicativa y un discurso hilado.
Pese a todo eso, parece que le alcanzará para ser candidata y ya se verá en campaña si le es suficiente para ser gobernadora.
Otro dato interesante es que contrario a sus adversarias, Ana Lilia Rivera y Dulce Silva, quienes han gastado más de 200 mil pesos en facebook para posicionarse, no ha metido un solo peso.
Su fortaleza es que mantiene su estructura paralela al partido, el cual no controla, y se ha logrado mantener a la cabeza en las preferencias electorales en las encuestas, con la percepción de que es la única que puede hacer ganar a Morena en Tlaxcala.
Lo cierto es que el equipo o los gabinetes de comunicación que entiendan en el 2021 como ejercer la comunicación disruptiva y romper con el orden de lo que el cerebro recibe entre millones de mensajes y hacer previsible la transmisión de mensajes, logrará su cometido. Al tiempo.
A diferencia de Ana Lilia Rivera y Dulce María Silva, Lorena Cuéllar Cisneros tiene mucho que perder en este proceso electoral 2020-2021. Me explico: su carrera política en el sector público inició en 1992 al ser directora del DIF capitalino, a principios del nuevo siglo pasó de ser síndica a diputada local y luego alcaldesa capitalina. En 2012 fue senadora y en 2016 candidata al gobierno de Tlaxcala, proceso electoral en el que perdió ante Marco Mena por no cuidar muchos aspectos que hoy se nota sí observa, como evitar caer en provocaciones políticas, no incurrir en “campañas negras” ni en la tentación de violar la ley electoral, como evidentemente ya lo hacen sus adversarias al adelantarse en el proceso interno de su partido y sus elevados gastos de precampaña. Si Dulce Silva no es elegida en la encuesta de Morena se irá de Tlaxcala igual de rápido que como llegó a irrumpir y Ana Lilia volverá al Senado, pero ¿qué pasaría con Lorena si no es elegida? Sobre todo tomando en cuenta que su paso en la delegación del Bienestar ya feneció y el cargo de diputada federal que le “regaló” a Claudia Pérez como suplente prácticamente ya terminó. Por todo lo anterior considero que Lorena Cuéllar hoy actúa con mayor cautela al jugarse su última carta para ser, o no ser, la próxima gobernadora de Tlaxcala.
Moisés Morales del Razo. Columnista.
Aparentemente Lorena comunica confianza, seguridad, empatía, una postura que lleva tiempo manejando, y que le ha funcionado para ganar simpatizantes en su trayectoria política, es una mujer que busca la mejor estrategia para lograr sus objetivos, aunque esto implique moverse constantemente de partido, considero que debe ser mas estable para no perder credibilidad.
Psicóloga. América de León Ramírez. Autora del Diván de la Política.
Indudablemente es muy conocida entre la ciudadanía, considero que ha llegado al punto máximo de popularidad, sin embargo, debe buscar estrategias de comunicación para permear entre sus posibles votantes. La gestión de sus redes sociales presenta muchas áreas de oportunidad.
Eduardo Fernández. Columnista.
Las publicaciones en las que la Cuellar Cisneros incluye parte de su vida privada, también son de alto impacto en la opinión pública al computar más de 1000 reacciones por publicación.
A manera de conclusión de los datos esbozados en estas líneas, es posible deducir que las publicaciones con mayor imparto de la página de Facebook de la expresidenta municipal de Tlaxcala son en las que aparece su persona, sola o acompañada de personajes políticos o gente que es visitada en su agenda de trabajo. En otras palabras, podemos deducir que los seguidores de la página mencionada se sienten más atraídos por la figura que representa Lorena Cuellar.
En cuanto al contenido publicado por en la página de la exfuncionaria, podemos advertir que confluye en un contexto docente, informativo y humano que hacen juego con los antecedentes profesionales de Lorena Cuellar, en otras palabras, el contenido es congruente con su personalidad.
Santos Salazar. Columnista de la Séptima Jornada.
Desesperación.
Edgardo Cabrera. Director Gente TLX.
Sin lugar a dudas, bajo los cánones de la política, esa que era de escuela, tradición, de formación de cuadros, de tradición y reglas no escritas de la política, Lorena Cuellar representa el último eslabón de la clase política en el Estado de Tlaxcala y si, de esa “mazorca” a la que pertenecieron quienes hasta la fecha han tutelado el Poder Ejecutivo del Estado de Tlaxcala.
La joven sobrina de en aquel entonces Presidente municipal de la capital allá por los noventas, después Sindica municipal de otro Presidente de la Capital Tlaxcalteca que a la postre ganaría la Gubernatura bajo las siglas de un partido distinto al que militó, tuvo que voltear bandera para concretar una Alianza y así hacerse de la primera magistratura en la Entidad, tiempo después se vio obligada a dejar las siglas del PRI tras la trampa que le puso su propio partido al poner como Candidato a la Senaduría a ese Presidente Municipal con el que habría iniciado sus andares en terrenos de la política.
Con la experiencia que dan los años, con una disciplina institucional marcada y heredada, con la obediencia ciega para Andrés Manuel López Obrador que aun estando en la bancada del Senado del PRD de los “jejuses” votó en contra de la reforma energética junto con los ahora imprescindibles del Obradorismo que valga la pena señalar Mario Delgado, Lola Padierna, Alejandro Encinas, Manuel Camacho Solís y Adán Augusto López Hernández: Líder Nacional de MORENA, Vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Funcionario Federal, ex operador político de Amlo (D.E.P.) y gobernador de Tabasco, respectivamente, se ha mantenido en los ánimos del Presidente de la República, tanto, que no sólo la nombraron Super Delegada de los Programas del Bienestar en Tlaxcala después de que la pusieron a competir por un puesto de elección popular en un Distrito electoral complejo y bajo las siglas del Extinto partido PES y que ganó de manera holgada y para muchos era el único distrito seguro, más allá del efecto Amlo, Cuellar tenía buenos números en las preferencias electorales y que después de renunciar como Diputada de Mayoría solicitó licencia al cargo para incorporarse al Gobierno Federal hasta el mes de Octubre y que para acentuar esas confianzas del mandatario federal, le permitieron poner al encargado de la Secretaria del Bienestar en Tlaxcala.
Comunica pues, institucionalidad, obediencia, lealtad y sobre todo esa disciplina recalcitrante que en regeneración nacional está ausente debido a ese sui géniris nacimiento que tiene como instituto político; en palabras de mi amigo consultor y experto en comunicación política Rafa Vargas, las acciones, el estilo, la manera de hacer política y hasta el vestir: ¡todo comunica! Veremos si la frivolidad, el resentimiento o el oficio político prevalece en la candidatura a la gubernatura del Estado de Tlaxcala…Es cuanto!.
Luis Girón Soriano. Columnista.