El Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Tlaxcala, encabezado por su dirigente estatal Juan Manuel Cambrón Soria, lanzó un enérgico reclamo al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tras la polémica utilización de la Plaza de Toros “Jorge Aguilar El Ranchero” como sede de espectáculos de circo, promovidos incluso por el propio Gobierno del Estado.
En un oficio dirigido al Centro INAH Tlaxcala, el dirigente del PRD recordó que la plaza se encuentra en el corazón del Centro Histórico de Tlaxcala y forma parte de la zona de amortiguamiento del Conjunto Conventual Franciscano y Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, reconocido en 2021 por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
El documento acusa que la instalación de carpas y adecuaciones para espectáculos ajenos a la vocación del recinto representan una violación a la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, además de ser un atentado contra la memoria cultural del estado.
“Irrespeto al patrimonio histórico”
Cambrón Soria subrayó que la ciudadanía ha sido testigo del uso indebido de la plaza, lo que ha generado un amplio rechazo social y político, pues se percibe como una falta de respeto a los monumentos históricos y un acto de complacencia del gobierno local frente a intereses comerciales.
Las exigencias al INAH
El PRD pidió al instituto responder puntualmente cinco puntos:
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Si el Gobierno del Estado gestionó y obtuvo permisos para la instalación del circo.
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Qué proceso de análisis justificó la autorización.
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Qué medidas de protección se aplicaron para resguardar la estructura.
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Emitir un pronunciamiento oficial sobre si este uso es compatible con el estatus de Patrimonio Mundial.
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Informar qué acciones correctivas o preventivas se implementarán para evitar futuros abusos.
Llamado enérgico
El partido de izquierda advirtió que es inaceptable que las celebraciones oficiales se hagan a costa de la integridad de los monumentos históricos y acusó al gobierno estatal de vulnerar la normativa de preservación que rige en el centro histórico.
“Tlaxcala no puede permitir que lo que nos dio el reconocimiento mundial de la UNESCO se convierta en un escenario de improvisaciones y ocurrencias oficiales”, sentenció el dirigente del PRD.
Con este oficio, el PRD coloca al INAH en el centro del debate, exigiéndole transparencia y firmeza frente a lo que consideran un atropello cultural que no puede repetirse.