- Antonio Martínez Velázquez subrayó la importancia de que los usuarios digitales estén alerta y sean más críticos para discernir en redes sociales lo que es o no verdad, y que los medios de comunicación adviertan con responsabilidad la existencia de estos fenómenos en sus plataformas
El coordinador de Comunicación del Gobierno del Estado, Antonio Martínez Velázquez, convocó a los medios de comunicación y la ciudadanía a hacer del acceso a la información un instrumento para el debate abierto y democrático, que contribuya a la construcción de una mejor sociedad y haga frente a la desinformación, principalmente, en redes sociales.
En su intervención, durante el Diálogo Circular realizado en el Auditorio “Trinidad Sánchez Santos” de la Coordinación de Comunicación (CCOM), explicó cómo emergen, actualmente, “movilizaciones estructuradas de mensaje que distorsionan la percepción colectiva y ponen en riesgo la autenticidad del diálogo democrático en Tlaxcala, en México y en todo el mundo”, fenómeno que, dijo, ataca la confianza ciudadana en las instituciones.
El vocero del Gobierno de Tlaxcala indicó que hay evidencia de “operaciones digitales coordinadas, pagadas y automatizadas que buscan distorsionar la conversación pública digital en Tlaxcala y en otros estados del país”, entre ellos Morelos, Puebla y el Estado de México, incluso, a nivel nacional, como recientemente lo expuso la presidenta Claudia Sheinbaum, al detectar publicaciones negativas que provienen de perfiles de dudosa identidad, de reciente creación y con pocos seguidores, a través de los cuales se busca amplificar la difusión de mensajes distorsionados y ofensivos contra el gobierno federal.
Mencionó que hay estudios que demuestran estas actividades, como el realizado por el Oxford Internet Institute, que analizó campañas de desinformación en 70 países e identificó dos fenómenos: la operación de cuentas automatizadas y la difusión de mensajes coordinados de comunicación. También, que Facebook es la plataforma más preferida para la manipulación de opinión pública en 56 de los 70 países analizados, entre ellos México, donde es la red social más utilizada.
“Entonces, yo preguntaría, ¿qué tan orgánico es lo orgánico en las redes sociales?”, planteó Martínez Velázquez, al observar que “las operaciones coordinadas y las dinámicas que simulan ciertos movimientos de activismo digital” deterioran el humor social en redes sociales, y generan la percepción de una crisis de reputación, aunque no exista, ya que hay picos repentinos en los comentarios, generados por “cuentas sin foto, nombres genéricos, sin activaciones previas, interacciones vacías, o sea, sin respuestas, y sin contenido, que afectan la percepción pública y sobre todo la confianza de la gente”.
Al respecto, el titular de la CCOM puntualizó que en la conversación orgánica hay comentarios negativos que generan debate sobre la manera en que las autoridades deben satisfacer las demandas de la gente, y que el gobierno no niega esta situación, ni las quejas legítimas que sirven para conocer el sentimiento de la ciudadanía y proponer respuestas a sus demandas: “Hay descontento social, por supuesto; hay críticas al gobierno, por supuesto, pero estamos viendo una versión hiper acelerada por este tipo de fenómenos, ya sea coordinados de manera centralizada o con cuentas falsas”.
Por todo lo anterior, y al considerar el actual contexto de postverdad, desinformación y auge de la Inteligencia artificial, subrayó la importancia de que los usuarios digitales estén alertas y sean más críticos para discernir en redes sociales lo que es o no verdad, y que los medios de comunicación adviertan con responsabilidad la existencia de estos fenómenos en sus plataformas, mediante la identificación y el análisis de cuentas, para hacer frente a las mentiras digitales que afectan el derecho a la información.
“Entonces, lo más importante será aprender a ser usuarios críticos de los medios digitales y poder discernir qué es información, qué es desinformación, y que estos fenómenos existen y no negarlos”, apuntó.