La Bestia Política

Familia exige destitución de directora del Hospital no.1 del IMSS Tlaxcala tras denunciar maltrato, negligencia y robo de expedientes

Mariana LOVERA// La familia Morales, integrada por dos adultos mayores y su hija, fue desalojada con violencia de las instalaciones del Hospital General de Zona No. 1 del IMSS en Tlaxcala, en medio de señalamientos de maltrato verbal, amenazas y la negativa ilegal de entregar los expedientes médicos.

Los hechos, grabados en video por la propia afectada y denunciados públicamente, han escalado tras el testimonio de la hija, quien reveló nuevos y graves detalles en una entrevista telefónica que brindó a la Bestia Política.

De acuerdo con el relato, el conflicto estalló durante una cita programada para el 19 de noviembre con la directora del hospital, Karla Mendiola, a la que acudieron tras gestiones realizadas en la subdelegación del IMSS.

Al ser recibidos, la familia esperaba una solución tras cinco meses por una cirugía de próstata para el señor. Sin embargo, la directora les informó que el expediente del paciente «estaba en ceros», afirmando que no había registro de sus consultas previas.

«Realmente fue algo que a mi papá lo impactó, lo dejó en shock. Él le dijo: ‘¿entonces nunca me iban a operar?'», relató su hija.

Al mostrar los documentos y estudios médicos pagados por la familia –realizados en el sector privado para agilizar el proceso–, la situación se tornó violenta. La señora Morales preguntó quién era el responsable de la falta de registro en el expediente, a lo que la directora Mendiola respondió de manera agresiva: «Yo no voy a hacer lo que tú me digas» y les informó que tendrían que «empezar de cero», lo que implicaba otros seis meses de espera.

Al insistir en una respuesta, la directora comenzó a gritar «¡Seguridad, seguridad!» en repetidas ocasiones. Al lugar acudieron hasta cuatro elementos con macanas.

«Nos dejó impactados… no te puedo describir porque aún tengo miedo», declaró la hija del afectado.

La situación escaló cuando la señora madre, mencionó el nombre de otro médico. En ese momento, una de las guardias de seguridad empujó a la señora de 64 años.

Amelia comenzó a grabar con su teléfono, acto que enfureció más a la directora, quien gritó: «¡Seguridad y llámale a la fuerza estatal!». Los guardias intentaron arrebatarle el celular y, acto seguido, agarraron los documentos médicos de la familia y empujaron a los tres miembros fuera de la oficina.

«Nos sacan como a unos vil delincuentes… sentí mucho miedo porque ellas tenían macanas… mi impresión fue de que nos iban a golpear», denunció.

El afectado, quien además sufre de diabetes, sufrió un shock tan severo que su condición se complicó y tuvieron que llevarlo a una clínica particular para ser estabilizado. La familia asegura que el trauma ha sido profundo.

«Mi papá ya tiene temor de regresar a ese lugar. Dice: ‘Si nada más por preguntar nos sacó, casi me golpean… ¿cómo voy a poner en manos de ellos que me hagan una cirugía?'», expresó su hija.

La familia ha emprendido acciones legales y exige:

1. La destitución inmediata de la directora Karla Mendiola y de su auxiliar, a quienes señalan como las responsables directas del maltrato.
2. La recuperación completa del expediente médico y los documentos sustraídos.
3. Una investigación a fondo de las prácticas del hospital.

Hasta el momento, han obtenido el apoyo de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, que ya emitió un acta certificada, y de abogadas feministas, quienes ya interpusieron un amparo que deberá ser resuelto en 24 horas.

La denunciante desmintió categóricamente las versiones públicas del jefe de Servicios Médicos, Dr. Fernando Moncada, y reiteró que su familia fue «violentada, humillada, intimidada y desalojada con violencia y amenazas por orden de la directora».

La familia hace un llamado urgente a la Gobernadora de Tlaxcala y, de ser necesario, a la Presidenta Claudia Sheinbaum, para que intervengan y destituyan a la directora Mendiola.

«Pedimos un llamado… que tome cartas en el asunto… porque si es necesario nos iremos a parar al Palacio Nacional», finalizó. «Se aprovechan porque somos personas de bajos recursos, pero fueron mis papás y no me voy a quedar callada».