Este año me dejó aprendizajes profundos.
Hubo aciertos y también errores, y de cada uno he aprendido con humildad. Esa experiencia hoy me permite mirar hacia adelante con mayor claridad, madurez y responsabilidad.
El proceso electoral fue una etapa importante, pero no definió el compromiso que tengo con Apetatitlán. Al contrario, reafirmó mi convicción de seguir trabajando, escuchando y caminando junto a nuestra gente, porque el servicio público va más allá de los cargos y de los momentos.
He recorrido Belén, San Matías, Tlatempan, Tecolotla, las Unidades habitacionales Tlahuicole y Petroquímica asi como la cabecera municipal. En cada comunidad he encontrado historias que inspiran, preocupaciones legítimas y, sobre todo, un profundo amor por este municipio. Ahí confirmé que el camino correcto es el del diálogo, la cercanía y la suma de voluntades para construir soluciones juntos.
Creo firmemente que Apetatitlán puede avanzar con respeto, con instituciones fuertes y con participación ciudadana. Señalar lo que se puede mejorar no divide; hacerlo con responsabilidad y propuestas es una forma honesta de contribuir al bienestar común.
Cierro este año agradecido. A mi familia, que es mi mayor fortaleza y mi guía; a mis amigas y amigos, por su apoyo sincero; y a cada persona que me ha abierto la puerta de su hogar y me ha regalado su confianza. Todo ese cariño me impulsa a seguir adelante.
Llego al nuevo año con más experiencia, con ánimo renovado y con la firme decisión de seguir aportando, desde donde me toque, al desarrollo de Apetatitlán y de todas sus comunidades.
Que el próximo año nos encuentre unidos, trabajando juntos y mirando hacia adelante, por el bien del municipio que amamos.
Con respeto y esperanza,
Iván Teomitzi Solís