En un hecho sin precedentes para el campo tlaxcalteca, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera anunció que el sistema agrícola ancestral del Metepantle ha sido oficialmente reconocido como Patrimonio Agrícola Mundial por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Tras seis años de trabajo conjunto con campesinas y campesinos del estado, la legisladora celebró esta distinción histórica que posiciona a Tlaxcala como referente internacional en prácticas agroecológicas sostenibles.

“Este es un regalo que le da Tlaxcala al mundo. A pesar del abandono, nuestra raíz más profunda nos hace visibles y dignos. El Metepantle representa la resiliencia de nuestra tierra y la sabiduría de quienes la cultivan”, declaró la senadora.

Un sistema ancestral, un modelo global

El Metepantle es una técnica agroecológica milenaria basada en la intercalación de hileras de maguey con cultivos como maíz, frijol, calabaza y flora silvestre. Este sistema no solo conserva semillas y protege la biodiversidad, sino que fortalece la seguridad alimentaria, combate la erosión y provee fibras, alimentos, bebidas y hábitats para polinizadores.

Gracias a la resistencia del maguey a la sequía y su capacidad de retener agua, la FAO ha considerado al Metepantle como el modelo más relevante a nivel global para ser replicado frente al cambio climático.

Tlaxcala pionera en sostenibilidad

Durante una reunión con productores de Españita y Chiautempan, Ana Lilia Rivera detalló que el objetivo es replicar el sistema en los 60 municipios del estado mediante capacitación agrícola, gestión de presupuestos estatales y federales, y la búsqueda de financiamiento internacional.

La senadora confirmó que fue el pasado 20 de mayo cuando la FAO anunció formalmente la inclusión del Metepantle en el programa Sistemas Importantes del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM). En próximos días se recibirá el certificado oficial con la participación de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).

“Hoy Tlaxcala vuelve a ser semilla. El mundo nos mira porque conservamos lo que otros han perdido: la sabiduría del campo y la armonía con la tierra”, concluyó.