Por Andrea Denis
En Chiautempan el cambio en la Dirección de Seguridad era justo y necesario, aunque a muchos no les guste o no lo quieran ver, en poco tiempo se ha visto un cambio en la estrategia de seguridad que encabeza el Ayuntamiento de Gustavo Jiménez.
La semana pasada, la Policía Municipal asestó un duro golpe a una banda de jóvenes que traían azorados a los chiautempenses, pues no había semana que no se reportara un cristalazo a los vehículos para sustraer los objetos de ahí.
Finalmente, y luego de un trabajo de inteligencia y de la denuncia de la gente, se logró la captura casi in fraganti de estos cuatro malandros que deberán rendir cuentas con la justicia. Por cierto, dicen que los anteriores directores de seguridad ya los tenían bien ubicados pero, por alguna extraña razón nomás no actuaban. ¿Será?
Xicohtzinco bronco.
En el municipio sureño de Xicohtzinco hemos conocido el Tlaxcala bronco, ese que pensamos era cosa del pasado. Pues luego de casi un año, la inestabilidad que vive esa demarcación es uno de los grandes pendientes del gobierno de la 4T en la entidad.
Por donde se le quiere ver, el asunto ahí ya es estatal y hasta federal, pues el poco respaldo que ha tenido el alcalde Luis Ángel Barroso, primero por la ciudadanía, luego por su partido y también por el gobierno estatal, lo ha rebasado a grado tal que el Congreso local ya barajea la posibilidad de mandarlo a la congeladora unos meses para despresurizar la olla de presión y que con el tiempo el lugar regrese a su calma y vida normal.
Ya veremos que pasa en estos días, lo que sí es cierto es que la juventud y novatez del alcalde Barroso Ramírez le está cobrando factura, pues ha estado más preocupado en cobrar sus quincenas puntualmente que en resolver un conflicto que tenía como solución realizar un trabajo comprometido y ejecutar obras y acciones en beneficio de sus gobernados.
