Lamentable el fallecimiento de la joven Beatriz como fruto del conflicto entre las normalistas y el Gobierno del Estado. Hacemos oración por su eterno descanso y nos solidarizamos con su familia. Espero que cada parte ponga lo necesario para que se solucione pronto este conflicto que ya costó una vida. Ranulfo Rojas Bretón. Vocero de la Diócesis de Tlaxcala. 

 

La sociedad como tal tiene derecho a expresarse y en Morena apoyamos las causas y la justicia con causas.
Sin embargo, el presenciar actos dónde no se sabe dónde termina la libertad deunos e invade la libertad de otros entristece, pues se pierde el sentido del objetivo que se buscaba con la manifestación. Luz Vera Díaz. Secretaria General Morena Tlaxcala.

 

El PRD lamenta el hecho provocado por la ineptitud de un secretario de educación pública, de un secretario de gobierno, y de un secretario de seguridad ciudadana.

La muerte de una alumna de la normal esperemos no sea el inicio de un panteón de represión en el estado de Tlaxcala, que si bien ya tenemos un muerto por la corrupción en los contratos millonarios del secretario educación pública no podemos seguir permitiendo el miedo y el terror solapado

Debemos revisar que es falta de diálogo Lo que pudo evitar esta tragedia y esperamos que los elementos de policía que participaron en ese operativo sea del porcentaje que presume la SSC que ya está acreditado.  Julio César Hernández. Presidente PRD Tlaxcala. 

 

Hemos sido testigos del llamado del Gobierno Estatal al diálogo y la negociación. Esa es la única vía, las manifestaciones deben ser en el marco de la legalidad y el respeto a los derechos humanos. En un estado democrático el único camino es el diálogo recordemos que en nuestro movimiento, las luchas sociales siempre se han dado sin atentar nunca contra la integridad de terceros, siempre han sido pacificas. conductas claras de una vocación democrática, reconocemos la manifestación pacífica de las compañeras normalistas este domingo y la apertura permanente del gobierno estatal, deseamos que mediante este camino pronto alcancemos nuevamente tranquilidad que nos caracteriza a la sociedad tlaxcalteca.  Carlos Augusto Pérez Hernández. Presidente Morena Tlaxcala. 

 

Considero que las normalistas han incurrido en excesos, nadie puede estar de acuerdo en la comisión de actos vandálicos como la toma de carreteras, el saqueo de mercancía de un camión y mucho menos el uso de bombas molotov, lo cual, además de que constituye diversos delitos, es evidente que pone en riesgo no sólo a las y los participantes en la manifestación, sino a la ciudadanía en general que tuvo la mala suerte de transitar, por necesidad, en la zona.
Pero la resolución de ese tipo de conflictos, independientemente de qué tan legítimas se consideren sus demandas, forma parte del ejercicio de gobierno, y los gobernantes tienen que agotar el diálogo y la conciliación para alcanzar acuerdos; no es respondiendo con violencia como se contiene la violencia.
El gobierno del estado no se ha caracterizado por su tacto político y su capacidad de negociación con quienes recurren a las movilizaciones para hacer escuchar su voz y como medida de presión para la resolución de sus problemas, no sucedió con las manifestantes del 8M, tampoco con los sindicatos como el 7 de mayo y el de la Secretaría de Salud, ni siquiera con los familiares de víctimas que han demandado una justicia pronta y expedita; hoy es la cúspide al haberse desbordado la violencia y tener como saldo una estudiante muerta. No es con el silencio, ni ignorando los problemas como éstos se resuelven. Lety Valera. Columnista y titular del programa Mujer y Poder.

 

Lamentamos que los secretarios de las diferentes secretarias no den respuesta a las demandas cuando esta en sus manos de resolver, y dejar crecer la inconformidad, en el caso de Homero su lenguaje despectivo hacia las estudiantes, no hacer una mesa de diálogo pública que entren medios de comunicación y en el caso del secretario de Gobierno es también un ejemplo y  nos da «atole con el dedo» a los campesinos por desactivar una manifestación, luego de comprometerse a darnos una respuesta puntual a las demandas y después mandar vocero y el de la SIA ni siquiera va y los deja esperando una hora.  Sus secretarios son de oídos sordos por eso le llegan problemas a la gobernadora,  lejos de ayudarle. Efrén López Hernández. Activista.

 

La muerte de una estudiante de la Escuela Normal Rural Lic. Benito Juárez es un claro ejemplo de lo que significa #UnaNuevaHistoria que tanto presume la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, para Tlaxcala.

A reserva de que las autoridades competentes determinen si Beatriz N., perdió la vida como consecuencia del enfrentamiento que tuvieron los estudiantes con los elementos antimotines, en el que ella estuvo presente; resulta sorprendente cómo las secretarías de Educación, Gobierno y de Seguridad Ciudadana no pudieron contener este conflicto que inició desde septiembre. Lo dejaron crecer y crecer y crecer hasta que explotó con un intercambio de granadas de gas lacrimógeno, por un lado; piedras y bombas molotov, por el otro lado.

Pero no solo esas tres dependencias tienen responsabilidad a partir de las acciones y decisiones públicas o privadas que tomaron y que incidieron en el caso; también habría que evaluar el discurso amenazante, estigmatizante y discriminatorio que comunicó el Gobierno del estado a través de las declaraciones de los funcionarios, filtraciones y de su propia narrativa gubernamental, la cual, sin duda, fue uno de los elementos que alimentaron el espíritu combativo de las estudiantes. Un discurso que provocó a las alumnas normalistas, tanto, que era obvio que iban a reaccionar con la furia con la que han reaccionado sus similares en otros estados.

¿De verdad los funcionarios, tan expertos en sus áreas, no calcularon que podrían provocar y empeorar un conflicto mayor con unas cuantas palabras?, a muchos nos dejarán con la boca abierta si responden que no.

El mismo discurso amenazante, estigmatizante y discriminatorio, en contra de las estudiantes, igual fomentó el discurso de odio hacia ellas; basta leer la conversación digital de miles de cibernautas que las tacharon de revoltosas, delincuentes y hasta pidieron matarlas. Se les olvidó que antes de ser estudiantes normalistas son mujeres y, solo por eso, están en posibilidad de pedir una toalla sanitaria al gobierno y a ser protegidas por las leyes que les garantizan una vida libre de violencia.

Y hablando de responsables, la más responsable es la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros porque, a pesar de que delega, de ella depende todo su Gabinete legal y ampliado, las decisiones que ahí se toman y las respectivas consecuencias.

Entonces, en un contexto que ha evolucionado hacia el respeto y la garantía de los derechos humanos, hacia la empatía, hacia la paz, hacia los abrazos y no balazos, no es posible que haya muerto una estudiante, y que todos los funcionarios o servidores públicos sigan firmes en el aparato gubernamental, porque si esto se confirma, el mensaje que habrá de enviar la mandataria es el de que podrán caer todas las estudiantes que sean y los funcionarios seguirán fijos y beneficiados por el abuso del poder público de #UnaNuevaHistoria que ahora carga con la muerte de una mujer estudiante que, como protagonistas de un conflicto estudiantil, aspiraba y luchaba por ser maestra. Ana Laura Vásquez. Periodista, maestra en Periodismo sobre Políticas Públicas.

 

Un problema que se pudo haber solucionado con una efectiva mesa de negociación entre ambas partes, el diálogo y la concertación estuvieron ausentes, considero que la educación en las normales debe mejorarse desde el planteamiento de los planes y programas y el mejoramiento de sus instalaciones. José Luis Guzmán Zecua – Maestro en Gobernanza y Gobiernos Locales.