Desde el interior de Palacio de Gobierno siempre ha habido voces que minimizan las encuestas donde la morenista Lorena Cuéllar aparece abajo, pero en la última semana hubo un interés inusitado por difundir en medios de comunicación la de Arias Consultores, donde la tlaxcalteca da un brinco sorprendente y se coloca en el Top 10.
La danza de las encuestas no es nueva en Tlaxcala. Hay quienes solo las aplauden cuando los números les favorecen y las descalifican cuando no. Pero lo que ocurre con la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros va más allá de las clásicas contradicciones: es un caso de realismo mágico estadístico.
La política es una selva, pero en Tlaxcala se ha vuelto un circo de espejos. Cuéllar se ha convertido en la protagonista de un acto que ha llamado la atención de quienes se dedican a realizar estudios de opinión.
No me atrevería a descalificar a esta casa, que cuenta con 13 años de experiencia realizando encuestas de campo, telefónicas y en redes sociales a nivel nacional, y que presume entre sus valores como empresa la seriedad y veracidad.
Pero lo cierto es que sí resulta curioso que Cuéllar Cisneros, en apenas tres meses, haya pasado de ser la penúltima peor evaluada del país —lugar 31, según Arias Consultores en febrero— a colocarse en el Top 10 nacional, según la misma casa encuestadora.
La mandataria tlaxcalteca, que apenas alcanzaba un 6.2% de aprobación, ahora presume un 36% y ocupa el séptimo lugar nacional. Un ascenso de 24 posiciones sin reformas visibles, sin resolver crisis clave y sin explicación técnica verificable. ¿Milagro? Quizá no en la calle… pero sí en las gráficas. Y eso no es todo: lidera en “credibilidad”, con 58% que afirman que dice la verdad. Encabeza la medición de “relación con la presidenta Claudia Sheinbaum”, con 62.6%.
Pero entonces llega Massive Caller, cual aguafiestas metodológico, y revela otros datos: En mayo 2025 pone a Cuéllar en el lugar 23 en percepción de inseguridad, lugar 31 en confianza ciudadana (solo arriba de Oaxaca), y lugar 28 en aprobación general, con apenas 33.4%.
Entonces… ¿a quién le creemos?
Ni siquiera coinciden por error decimal. Una encuesta la pinta casi como la “presidenciable” de Morena; la otra, apenas le lanza un salvavidas.
Y otro invitado a la fiesta de cifras, una empresa local como Impulso Mercadológico, revela que la mayoría tampoco la respalda. La muestra fue de 600 ciudadanos mayores de 18 años, residentes en 30 municipios del estado de Tlaxcala, sobre la pasada elección judicial.
Los datos de la reciente encuesta de Impulso Mercadológico reflejan un patrón claro: la gobernadora enfrenta altos niveles de desaprobación, incluso entre quienes no participaron directamente en el proceso electoral judicial. Entre quienes declararon «no voté», el 67.31% desaprueba su gestión. Entre quienes anularon su voto o escribieron leyendas, el rechazo es del 64.81%. Y aún entre quienes «votaron con normalidad», la desaprobación alcanza un 58.33%.
Estos números evidencian que el rechazo a la figura de la mandataria trasciende el acto electoral y se refleja como un juicio social más profundo. Lejos de ser un tema de participación o abstención, los negativos se consolidan como un signo de descontento estructural que requiere una lectura política seria: la desaprobación es transversal, no coyuntural.
Dicen los defensores de la 4T que no es magia, sino percepción: actos públicos, obra visible. Puede ser. Pero si los números no se reflejan en la calle —donde persisten la inseguridad, y el colapso del sistema de salud el castillo de cartas podría derrumbarse con la siguiente tormenta.
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LA CAMINERA.… Más ruido un tacón que un discurso…Aunque el PRI Tlaxcala organizó un evento histórico de bienvenida a la comunidad LGBT+, lo que más llamó la atención no fue el discurso de inclusión, ni los reconocimientos, sino el baile de una integrante de la comunidad en plena Sala de Presidentes.
En un partido tradicionalmente conservador, el momento se volvió símbolo: no por lo que se dijo, sino por lo que se vio. El tacón retumbó más fuerte que cualquier aplauso político.
¿Cambio de época… o solo show de temporada?
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AHORA SÍ, LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS…Cuando el hartazgo hace justicia por su propia mano…El video viral donde pobladores de Atlahapa, en Tlaxcala capital, propinan una golpiza a dos presuntos ladrones es mucho más que un momento de indignación colectiva: es un síntoma.
Antes de cualquier aseguramiento formal, fue la ciudadanía la que reaccionó —con furia, pero también con desesperación. Esa tunda no es solo castigo a delincuentes, sino una bofetada simbólica al sistema que no previene ni responde a tiempo.
El hecho de que vecinos salieran primero a golpear y no a confiar en la autoridad revela lo más grave: la fractura entre ciudadanía y gobierno en temas de seguridad.
Cuando la justicia se vuelve viral en forma de linchamiento, es que algo más profundo está roto. Y no se arregla con comunicados. Se arregla con presencia real, coordinación efectiva y resultados que se noten en la calle, no solo en los partes policiales.