A quién parece que no le salen las cosas es a Minerva Hernández Ramos en su lucha por la dirigencia estatal del Partido Acción Nacional en Tlaxcala.

Resulta que a  escasos días de que se lleve a cabo la votación para la renovación de la Dirigencia Estatal del PAN en Tlaxcala, la cosa está cada día más dividida y con una campaña de señalamientos con el dedo llena de desprestigios. Augurando un mal presagio para el panismo tlaxcalteca.

Sin duda,  la candidata más ignorada es la ex perredista y senadora con licencia por cuarta vez, Minerva Hernández Ramos. Resulta que su suplente en el Senado, la panista Maura Hernández Fernández, se lanzó contra Minerva por no permitirle asumir la suplencia de la senaduría en el Congreso de la Unión. Su misma compañera de fórmula le da la espalda, y refleja la mezquindad de una política que aspira a dirigir a un partido, y no cumple su palabra.

«Como nos sentamos a acordar con Minerva Hernández Ramos, si no cumple su palabra ni con su suplente con quien hizo campaña para senadora,. y ahora resulta que le cierra el paso para que asuma el cargo en lo que ella pidió licencia, con eso, los panistas no vamos con ella, ni a la esquina, pues no va a traicionar».

Para variar,  otra panista como Adriana Dávila ni siquiera está en su campaña,  quien, en estos días tan importantes para Minerva, ha decidido alejarse al preferir visitar a militantes de la zona oriente y de Melchor Ocampo, Estado de México, o visitar Tehuacán, Puebla, para impartir una conferencia sobre Mujeres Trabajando.

Todo parece indicar que Adriana Dávila intuye que es un caso perdido, y prefiere enfocar sus energías a otros proyectos más redituables, que perder el tiempo en pedir el voto para quien la traicionó hace años.

A eso, hay que agregar que su compañero de fórmula, el ex alcalde de Tenancingo Daniel Martínez es flojo, y en su momento acudió con la otra candidata Miriam Martínez, para venderle según él su super estructura a cambio de puestos en el Comité Directivo Estatal. Daniel se ha convertido en un lastre para la campaña de Minerva Hernández.

Y aunque Miriam Martínez también ha cometido errores en su campaña, parece que el ser panista de hueso colorado, al final inclinará la balanza a su favor, y tendrá que ponerse las pilas si quiere hacer un partido competitivo, o lo entierra.

Sálvese quien pueda...¿Quien pagó  gobernadora…No se lo diga a nadie, pero parece que el acto de los cien días de nuestra flamante gobernadora Lorena Cuéllar está lejos del discurso de la austeridad del presidente AMLO, pues movilizar a más de 7 mil burócratas, colocar al menos cinco pantallas de alta resolución que tienen cada una un costo de renta no menos de cien mil pesos, un audio potente, renta de sillas, y pagar un periódico de bolsillo con su imagen, no es cosa menor.

Pagar todo eso para una legitimidad que se ganó en las urnas, creo que no enarbola a la 4T.

Un bolero dijo: Ese evento fue una mamada, deberían darnos mejor algo de dinero a nosotros.

Un automovilista expresó:  Poca madre paralizar todo el centro de la ciudad, por un pinche evento para ensalzar a la 4T.

Los animales del ARCA  de Andrea  Denis expresaron al unísono. «Sálvese quien pueda».