¡Vaya polémica! A más de un mes de la elección en Tlaxcala, ha cobrado notoriedad nuevamente el tema de las acciones afirmativas de la comunidad LGBTTTIQ+.
El secretario de Cultura, Antonio Martínez Velázquez, quien pertenece a dicha comunidad, planteó en días pasados, sin decir nombres, que quienes habían llegado al Congreso local a través de acciones afirmativas LGBTTTIQ+ debían comprometerse con la agenda de la diversidad o admitir que mintieron al pueblo para obtener de manera más fácil un escaño.
«Deben hacer conciencia», fueron las palabras del funcionario, quien enfatizó la responsabilidad de todos los ciudadanos de combatir los discursos de odio contra la comunidad LGBTTTIQ+, señalando que el verdadero adversario son los feminicidas, los transfeminicidas y las autoridades represivas. «El hecho de que un servidor público de alto nivel se asuma como homosexual, como en mi caso, repercute positivamente en otras diversidades para que puedan sentirse seguras», afirmó en entrevistas publicadas por la Jornada de Oriente Tlaxcala.
En rueda de prensa para dar a conocer los resultados de la tercera edición de la Semana Tlaxcala Diversa 2024, expresó: “La tercera reflexión tiene que ver con insistir, porque eso fue uno de los temas que se tocaron durante la Semana -de Tlaxcala Diversa-, que a las autoridades electas que mintieron sobre pertenecer a la comunidad, tienen de dos: o le dicen la verdad al pueblo o se comprometen con la agenda LGBTTTIQ+, pues no hay de otra”.
Recriminó a quienes registraron su candidatura a un cargo de elección popular, principalmente para las diputaciones locales, como personas no binarias o lesbianas (entre ellos abanderados de Morena y sus aliados), “y que no son parte de la diversidad, nunca los hemos visto”.
Sin embargo, remarcó que en Tlaxcala el exhorto es que las y los diputados electos como representantes de la diversidad sexual “digan la verdad”, sobre todo a quienes son parte del movimiento de la Cuarta Transformación, cuyos tres principios son “no robar, no mentir y no traicionar al pueblo”.
Preguntó por qué echar a perder los avances en materia electoral para abrir espacios a los diversos grupos prioritarios solo “por la vulgar ambición de tener un puesto público… yo espero que quienes están en esa situación puedan dormir tranquilos”.
Anotó que este llamado lo realiza no solo como funcionario público sino como portavoz de la comunidad LGBTTTIQ+ que discutió esta situación ampliamente durante la semana cultural, ya que le afecta en sus derechos humanos.
El balón fue lanzado al aire, pero las diputadas electas Madai Pérez Carrillo y Aurora Villeda, ambas de la candidatura común de Morena y sus aliados, lo bajaron y se metieron a la cancha a jugar con Martínez Velázquez.
Los aliados de la Cuarta Transformación revivieron un muerto que estaba siendo velado y pusieron en la escena otra vez y en la polémica a dos legisladoras que estarán en el ojo del huracán, y que trajeron al debate público lo que un representante de un partido aliado de Morena en plena sesión del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE), reveló que los partidos mintieron para cumplir con las acciones afirmativas.
La jugada de Aurora y Madai era muy fácil: no meterse en el tema de la privacidad sobre si pertenecen o no a la comunidad LGBTTTIQ+, pues finalmente ya fueron votadas en las urnas, sino dar a conocer o adelantar lo que será su agenda en este rubro.
Hay varias propuestas legislativas pendientes, como la derogación de un artículo discriminatorio del Código Penal relativo al «peligro del contagio» y una reforma laboral para garantizar empleo a personas trans y no binarias. Sobre eso y lo que ellas traigan debe ser la narrativa.
Madaí Pérez Carrillo reiteró que cada persona tiene puntos de vista diferentes y que el respeto hacia la visión de quienes somos es fundamental. “Trabajaremos de acuerdo a todos los grupos de una minoría, no solo para uno, porque representamos a un estado”.
-¿Usted mintió al pueblo al decir que es parte de la comunidad LGBTTTIQ+ (para llegar al cargo)?, se le preguntó.
-No, cada uno se identifica como quiere identificarse. Yo le decía a alguien, ¿tú me puedes decir que te sientes mujer porque te dijeron que eres mujer?, cada uno de nosotros tiene nuestro punto de vista y debemos aceptarnos como somos y sentirnos orgullosos de quienes somos.
Por su parte, Aurora Villeda Temoltzin, de Redes Sociales Progresistas (RSP), respondió: “Creo que la vida personal, privada, es privada, y el que tú estés en un cargo público tampoco es para que estés ventilando cómo llevas a cabo tu vida”.
Añadió que en esta materia ya hay apertura y “en el tema del amor, porque al final el amor es el amor y cada quien lleva el amor como es su sentir. Creo que aquí lo que hay que ser es muy incisivo es que no solamente vamos a representar cada uno de nosotros esas minorías, también en el caso de la diputación por las personas con discapacidad.
“Yo lo que les he comentado a estos grupos es que ya está visibilizado, hay que empezar a concientizar y lo siguiente será empezar a ver algún tema de leyes que favorezca realmente”, indicó y aseguró que asumirá esta agenda, “porque no es de ahorita” y que tiene “muchísimas amigas y amigos que son de estos grupos LGBTTTIQ+. “Y repito el amor es el amor, así como lo quieran ver”.
Insisto, no se trata de atacar o generar violencia hacia ambas legisladoras electas, pues su capacidad no está en duda.
Si ellas, en un arranque de honestidad, deciden revelar que si pertenecen o no a dicha comunidad, será decisión personal, pero mucho ayudaría a distender la tensión con quienes sí lo son.
Creo que la estrategia les ha fallado al desdeñar acudir a foros donde se abordan los retos de la acción afirmativa que representan y reunirse con miembros de la comunidad para crear una agenda conjunta.
La gran interrogante es: ya los representan, ¿ahora qué harán por la comunidad?
Están a poco más de un mes de que asuman el cargo. Vayan, armen foros, acudan a entrevistas, hagan lo que tengan que hacer, hablen sobre sus agendas, pero evadir no es la mejor alternativa.
Foto: Jornada de Oriente Tlaxcala.
******
LA CAMINERA… AMAGOS… Hace más de 24 horas el secretario de Gobierno de Tlaxcala recibió una llamada telefónica de una diputada electa.
¿O me reciben o no voy con la bancada de Morena en la próxima legislatura?
Luis Antonio Ramírez solo sonrió, tomó la llamada y recibió a la representante popular.
¿Qué hablaron?, no sé, pero es evidente que la política no sabe nada del manejo de emociones y crisis.
******
AHORA SÍ, LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS... El cascabel al gato… Hizo ruido el secretario de Cultura, José Antonio Martínez Velázquez, al exigir que quienes habían llegado a través de acciones afirmativas LGBTTTIQ al Congreso local, debían comprometerse con la agenda de la diversidad o admitir que mintieron al pueblo para obtener de manera más fácil un escaño.
Pero también arrastró a Morena y sus partidos aliados, pues estos habrían mentido al pueblo de Tlaxcala para cumplir con acciones afirmativas.
¿Por qué Carlos Augusto, dirigente estatal de Morena y los otros presidentes de partidos como FxM, Nueva Alianza, y Verde no han dicho nada?
Martínez Velázquez también expresó que en Tlaxcala, hay perfiles extraordinarios que los partidos podrían voltear a ver… “no en el PAN, porque nos odia, pero fuera de esto en otros hay cuadros que militan ahí”, por lo que deben abrir espacios para su formación, “no solamente para una élite de los mismos que por cumplir con la ley se hacen pasar por mujeres, por lesbianas o por no binarias, lo cual degrada la vida pública”.
El funcionario deslizó que el albiazul odia a la comunidad LGBTTTIQ y la presidenta local del partido, Miriam Martínez, también guardó silencio.
¿Fuego amigo? En sus reflexiones, el secretario de Cultura omite mencionar la responsabilidad de los partidos políticos en la simulación del cumplimiento de las acciones afirmativas –Morena, entre ellos, como parte de la candidatura común que postuló a las dos diputadas que resultaron aludidas-. En términos reales, está diciendo que el partido también incumplió con esos principios de no mentir, no robar y no traicionar al pueblo.
Con toda esta polémica me han hecho llegar dos preguntas importantes para el secretario:
Primera: ¿Por qué no se manifestó en contra de dichas candidaturas al momento de los registros, que era el momento idóneo para hacerlo, ni durante las campañas electorales, bueno ni siquiera al momento de la calificación de la elección que concluyó con la entrega de las constancias respectivas?
Segunda: ¿Alguien sabe cuáles son los avances en materia de cultura, los logros, las estrategias, los programas y los resultados obtenidos, toda vez que está a punto de dejar la Secretaría para incorporarse al gobierno de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum? Eso es tan importante como los resultados, que a todas luces también deben exigirse no solo a las diputadas Madai Pérez Carrillo y Aurora Villeda, sino a todos los integrantes de la legislatura local.
PARA REFLEXIONAR:
Parece un debate inacabado definir el mecanismo idóneo para acreditar la pertenencia a la población LGBTTTIQ+ sin invadir el ámbito de la privacidad y el derecho a la intimidad, por lo que puede plantearse como uno de los grandes retos legislativos en materia electoral.
Recordemos que la identidad de género y la orientación sexual son parte de la construcción de la propia identidad de las personas como resultado de una decisión libre y autónoma, en tal sentido, debemos entenderlas como parte de los derechos humanos que debe ser garantizado para todas las personas sin discriminación, ¿Cómo hacer compatibles, en el libre ejercicio de derecho, la decisión de hacerla pública o mantenerla en el ámbito de lo privado, con la exigencia social de hacerla pública cuando se trata de representantes populares registrados mediante la acción afirmativa dirigida a las personas de la comunidad LGBTTTIQ+?
