Faltan 172 días para que los tlaxcaltecas salgan a las urnas para elegir a su gobernadora y/o gobernador, y parece que las crisis serán algo recurrente en las campañas políticas.
Las crisis electorales saben que van a ocurrir en Tlaxcala, pero los equipos de campañas no hacen caso y dejan que el caos llegue, sin instalar el cuarto de guerra, donde se toman decisiones y el gabinete de control de daños es prioritario.
De acuerdo a diversos estrategas y un tema ya recurrente en los cursos de marketing electoral, primero se debe identificar si efectivamente están en juego tres factores: el daño a la reputación, a la confianza de los electores, y a la ética e integridad de una oferta electoral y de su ofertante, algo que ocurre en la entidad en estos momentos, sobre todo en el Partido de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Morena y su crisis tras la designación de quien será su candidata a gobernadora.
Lo que está pasando en Morena tras la designación de Lorena Cuellar Cisneros como Coordinadora de la Defensa de la 4T en Tlaxcala por el Comité Ejecutivo Nacional de Morena contiene los elementos de una crisis, al haber un daño a la reputación del partido, a la confianza de los electores, y a la ética e integridad de una oferta electoral, y de su ofertante.
Este miércoles hubo en las calles movilizaciones de seguidores de la senadora Ana Lilia Rivera, fundadora de Morena en Tlaxcala y cercana al proyecto del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador, quienes cuestionaron el pasado de la ex titular del Bienestar, pusieron en duda la reputación del presidente nacional de ese instituto político, Mario Delgado y de la Comisión encargada, con una encuesta que no tuvo una similar espejo, fechas que nunca se dieron a conocer del levantamiento, y que en menos de diez días lo hicieron, y la oferta electoral de la futura candidata, con frases de que el PRI ganará de todos modos, al tener dos abanderadas, Lorena Cuellar y Anabell Ávalos.
Nadie puede negar que Lorena Cuellar es la más posicionada en las encuestas desde hace meses, y eso lo demuestra la medición que levantó la empresa Consulta Mitofsky que este miércoles publicó sus resultados.
De acuerdo a la lámina de Preferencia Electoral en el Estado de Tlaxcala, en la intención de voto para elegir al próximo Gobernador o Gobernadora, los números favorecen a Morena con 36.7 por ciento de las menciones, seguido por el PRI con el 12.6 por ciento y el PAN con el 8.8 por ciento.
Con respecto a los resultados por posibles candidatos a la gubernatura, Lorena Cuéllar Cisneros claramente presenta la mayor preferencia entre los ciudadanos en general con el 44.1 por ciento de los encuestados, y aún más, alcanzó el 55.2 por ciento cuando se consultó solo a militantes o simpatizantes morenistas.
Debido a que esta encuesta cerró el lunes, en vísperas de la declaración de la ganadora del proceso interno de Morena, Mitofsky planteó escenarios con respecto a la coalición “Unidos por Tlaxcala” que conforman el PRI, el PAN, el PRD, el PAC y el PS.
En ese tenor, Lorena Cuéllar logró el 46.8 por ciento de la intención del voto contra el 27.8 por ciento de la Gran Alianza.
El estudio de opinión presentado fue aplicado a mil 200 personas mayores de 18 años residentes en el Estado de Tlaxcala, tomando en cuenta de manera aleatoria en 120 secciones electorales y en cada sección eligiendo dos manzanas. El error no sobrepasa el 3.8 por ciento en el caso de los resultados totales.
¿Cuál fue el detonador de la crisis entonces?
La falta de claridad del presidente Mario Delgado en los tiempos de la encuesta, el ocultar la metodología, y pensar que las otras dos aspirantes Dulce Silva y Ana Lilia Rivera estaban obligadas a creer ciegamente en su palabra, o no calcular que no respetarían el pacto de los resultados y las reglas internas.
Morena se divide. Aún no empiezan las precampañas, y es evidente que Lorena Cuéllar no contará con el apoyo de Ana Lilia Rivera, y Dulce Silva, quienes piden la reposición del proceso interno, y rompieron el pacto morenista al desconocerla. A ellas, se pueden sumar los molinistas, convertidos ahora en «Los Caramelos», y los ex gobernadores Alfonso Sánchez Anaya y José Antonio Álvarez Lima.
En el partido de la 4T, se cumple el dicho aquel que dice: “mujeres juntas, ni difuntas”. Mientras Ana Lilia Rivera, con un pasado priista igual, y Dulce Silva presumen de haber sido fundadoras de Morena en Tlaxcala, Lorena Cuéllar pasó por el PRI , PT, y por el PRD.
Ahora que ha conseguido nuevamente la nominación de un instituto político, las cosas se le complican, porque el no construir acuerdos le cobra factura. Lorena se puede quedar sola y debilitada, mientras su partido se sume en el caos a falta de orden y liderazgo.
Si Cuellar no es capaz de admitir que tiene una crisis y se dedica a minimizarla, en las urnas probará el costo de sus decisiones. Hoy más que nunca cobra vigencia esa frase del ex gobernador priista José Antonio Alvárez Lima: «Cada candidato es responsable de su triunfo o derrota».
La futura candidata de Morena, y de quien no hay que soslayar que pese a esta crisis puede generar que la moneda caiga de su lado, debe aprender a que los medios de comunicación no están para servirle, y que la crítica constructiva, y no el elogio desmedido le puede ser más útil.
Alguna razón ponderó Delgado en que Dulce Silva y Ana Lilia no serían competitivas como candidatas y que ella era la indicada, pero no sopesó que la que gana no gana todo, y los que pierden, no pierden todo.
¿Será que atrás de todo las protestas, haya sólo el interés de candidaturas?, Al tiempo.
*******
La caminera….No solo en Morena tienen problemas, pues el pasado uno de Diciembre cinco partidos políticos presumieron una gran alianza para la gubernatura de Tlaxcala, y 15 días después no se ven visos aún para su registro a más tardar el 23 de Diciembre ante el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones, como lo establecen los tiempos.
El PRI ya cumplió con su proceso interno y logró la unidad aparentemente con una candidatura de unidad con la alcaldesa capitalina con licencia Anabell Ávalos, a quien se sumará el Partido de la Revolución Democrática y el Partido Socialista, sin embargo, Acción Nacional parece que juega otro papel y podría salirse de ella, y participar solamente con Minerva Hernández Ramos, lo que complicaría la coalición.
En tanto, en el Partido Alianza Ciudadana deshojan la margarita y el cómo participa en una alianza, pues ha mandado mensajes de que podría no ir tampoco.
El hecho de que se salgan dos partidos de una coalición de cinco, significa una crisis para quienes llevan el papel de operadores en la llamada «Unidos por Tlaxcala».
A eso, hay que sumarle la salida de las filas del ex diputado local Juan Carlos Sánchez García, quien posiblemente este fin de semana podría ser anunciado como abanderado a la gubernatura del Partido Redes Sociales Progresistas, instituto que se verá sumergido en acusaciones de venta de candidaturas para ayuntamientos.
Otro escenario es que el PRI-PAN-PRD-PAC y PS vayan juntos para el poder ejecutivo local, pero en los ayuntamientos y diputados lo hagan solos, lo que generaría problemas, pues serán enemigos y para la gubernatura amigos.
*******
Ahora si, la última y nos vamos…La conferencia convocada por el equipo de comunicación de Dulce Silva para este miércoles fue un soberano fraude.
Primero, la empresaria no llegó a la cita, donde seguramente sería cuestionada sobre su postura por escrito tras el rechazo a la designación de Lorena Cuellar.
La otra, quienes dieron la cara no sabían ni por qué estaban ahí, pues resulta que se la pasaron cantinfleando una y otra vez, en realidad no tenían claro ni qué decir.
Bueno hasta se aventaron la puntada de responsabilizar a los periodistas que debían ser los principales críticos y no los morenistas de la «designación» de Lorena Cuellar como ganadora de la encuesta.
Esta conferencia de prensa iba a ser la primera que sostendría Dulce Silva con reporteros de la fuente política, donde no habría guión de por medio, pero «casualmente» la morenista optó por no acudir. ¿Qué pasaría de última hora?