Las columnas de los medios de comunicación nos pusieron a reflexionar sobre los destinos de la entidad de cara a las elecciones del 2027.

Y una reflexión que nos llamó la atención es que si bien es cierto, se respira unidad como ayer lo mencionaron en una editorial de un prestigiado medio, esa unidad no depende de la actual mandataria, sino de quienes se perfilan a encabezar los destinos de nuestra tierra.

Tras la publicación de una fotografía que circuló en todo el círculo rojo este fin de semana, muchas plumas comenzaron a coincidir en que los rumbos de la sucesión van por buen camino. Y tienen razón, sin embargo, es necesario acotar que si bien el candidato oficial es el alcalde de la capital Alfonso Sánchez García quien ya trabaja día y noche para levantar la mano, Josefina Rodríguez Zamora se ha posicionado no por el empuje de la mandataria local, sino por su trabajo al frente de la Secretaría de Turismo Federal cuya jefa inmediata es nada más y nada menos que la Presidenta Claudia Sheinbaum.

Tan solo recordemos cómo hace un par de años, Josefina era acosada en la Secretaría de Turismo Estatal a través de golpes mediáticos – tolerados en el mejor de los casos – que surgían de comunicación social del gobierno del estado desde plumas oficialistas y medios afines al régimen. Esto pese a campañas exitosas y que se han dejado de hacer como la de #TlaxcalaSíExiste.

Josefina dejó la Sectur estatal para abrirse camino sola en las altas esferas de la política nacional, ganándose el reconocimiento de la propia presidenta quien en un evento recordemos que le dijo frente a su gabinete: ‘Josefina trabaja mucho’.

Por eso suena risible la foto de la unidad, pues Josefina no es candidata de la gobernadora, aunque a Cuéllar Cisneros tampoco le caería mal que Josefina sea un plan alterno al suyo, pues sobra la amistad, lealtad y camaradería entre ambas políticas.

El reconocimiento de ambas políticas está más que probado, la lealtad también, el trabajo de Josefina la respalda para ser un plan también exitoso.

No perdamos de vista esos pequeños detalles pues en política vale mucho saber quien se forma desde el principio y quien se sube al tren al verlo avanzar.